El pretexto para esta profanación fue la celebración de una semana de festividades en honor a San Sebastián, cuya fiesta es el 20 de enero.
Una de las actividades es un paseo a caballo de un barrio a otro. Entonces, el sacerdote tomó parte en él montando un toro, y extendió el viaje a la iglesia.
En esta era ecológica donde los perros son bienvenidos como servidores del altar y se celebran actos religiosos para el funeral de los animales, es cada vez más común ver extravagancias profanas como esta.
No olvidemos que el mismo Papa Francisco ha declarado que los burros pueden ir al cielo ...
Traducido de Tradition In Action
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2) Este sacerdote en cambio usa perros como monaguillos.Una interesante y novedosa forma de... desacralizar la Misa!
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3) Y por último nos llega el solemne funeral de un perro en Bélgica. Con todo el aparato de la iglesia. Y los demás perros despidiéndolo o algo así. Pero para Misa Tridentina, no se presta el lugar! Faltaba más. Ustedes insensibles que no lloran por el perrito...
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