lunes, 22 de julio de 2019

S.E.R. Juan Rodolfo Laise - R.I.P.


S.E.R. Juan Rodolfo Laise OFMCap, obispo emérito de San Luis y decano del episcopado argentino, murió esta mañana a los 93 años de edad en la casa de reposo San Padre Pío, en San Giovanni Rotondo (Italia), donde residía desde hace diecisiete años tras renunciar por edad al gobierno pastoral de dicha diócesis argentina. Está siendo velado en el santuario  de Santa María de las Gracias de esa localidad italiana, donde mañana tendrán lugar sus exequias a las 16.30 horas. La diócesis de San Luis recordará a su pastor con una Misa a las 19.00 horas presidida por S.E.R. Pedro Daniel Martínez Perea.

(Actualización: post siguiente relacionado: Mons. Rodolfo Laise (RIP) presencia en coro Misa de la FSSPX (Video)




Monseñor Laise nació en la ciudad de Buenos Aires el 22 de febrero de 1926. Hizo la profesión solemne en la Orden Franciscana de los Frailes Menores Capuchinos el 13 de marzo de 1949, y fue ordenado sacerdote en la capilla de colegio Euskal Echea de Llavallol, provincia de Buenos Aires, el 4 de septiembre de ese año por monseñor Miguel de Andrea, obispo titular de Temnos. 


Fue ordenado obispo el 29 de mayo de 1971 en la capilla del colegio Euskal Echea. El 6 de julio de 1971 se convirtió en el cuarto obispo de San Luis, diócesis que había sido creada en  1934 por el papa Pío XI, sucediendo a monseñor Carlos María Cafferata. 

Gobernó pastoralmente esa diócesis por casi 30 años, hasta el 6 de junio de 2001. El lema episcopal que eligió para su ministerio era Fideliter (Fielmente), actitud que testimonió con su vida consagrada a Dios. 

Radicado en Italia, sus años jubilares los pasó en el Santuario de San Giovanni Rotondo, conocido por ser el convento donde vivió durante toda su vida San Pío de Pietralcina. Ahí cada día servía uno de los cuatro turnos de confesiones dispuestos para atender a los numerosos peregrinos que llegan hasta ese lugar. En dicho santuario estuvo en actividad hasta último momento, cuando sufrió la descompensación que acabó en su muerte: a las 6.00 de la mañana celebrada la Misa de siempre, y después confesaba en tres idiomas, hacía conferencia y atendía a los peregrinos. 


Entre sus muchas obras, destaca especialmente el libro Comunión en la mano. Documentos e historia, publicado originalmente en 1997, donde expone la reverencia que cada fiel debe dar al Santísimo Sacramento al comulgar. Con pruebas incontestables, concluye que la única forma de manifestar sinceramente con la palabra y con los hechos la fe en la presencia eucarística del Señor es el recibir la comunión en la boca, directamente de manos del sacerdote. De hecho, en su diócesis estaba prohibido comulgar de otra forma. La cuarta edición de este muy recomendable libro (Buenos Aires, Vórtice, 2005) puede ser descargada desde aquí. El libro ha sido traducido también a otros idiomas. (Agregamos que en ese libro se denuncia a la Conferencia Episcopal de mentir al Papa cuando le informó que en Argentina existía ya una costumbre de dar la comunión en la mano, cuando nadie sabía ni de lo que se trataba). 

Esta bitácora ofrece sufragios por el descanso de su alma. 

Requiem aeternam dona ei Domine.
Et lux perpetua luceat ei.
Requiescat in pace.



3 comentarios:

  1. Respuestas
    1. descansa.....ya descansó esos diecisiete años en Italia que no hacía labor pastoral....que mal que está eso, siendo que tienen salud "jubilarse", después se quejan que escasea el clero pero si losputos modernistas los obligan a "jubilarse"....

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